Como dicen mis amigos Pere y Juansi, autores de La Soledad de las Ballenas, estamos inmersos en tal contaminación acústica que no nos permite ni escucharnos a nosotros mismos.
Últimamente he estado oyendo que estar en las redes sociales es como un juego. Que somos marcas y que tenemos varias caras. No sé. Hoy dedico el post a mi querido Rilke, que dice así al respecto: » There are quantities of human faces, but there are many more faces,...