Photo by Verónica Gran (legranphoto.com)
En otro de mis posts, hablé sobre cómo suelo empezar mi día: siempre alineada con mi propósito de sentirme bien y obtener los resultados que deseo en mi vida.
Hoy retomo el tema para seguir dando más pistas que como siempre digo, a mi, me funcionan y que ojalá te funcionen a ti.
Cada día cumplo (porque realmente lo quiero) tres cosas. No más. Seguro que haré más cosas a lo largo de la jornada, pero estas tres cosas son las que quiero hacer de todas maneras.
«Mis cosas importantes del día», así es como le llamo a la libreta donde cada día anoto las acciones de esa jornada. Es lo primero que hago cada día al despertar, después de darme una ducha. Hacerlo en ese momento me permite no olvidarlo o dejarlo para más tarde.
De las tres cosas más importantes del día, dos de ellas está orientada a conseguir mi objetivo en la vida, mientras que la tercera puede estar más relacionado con tareas de todo tipo.
Para mi, esto es lo que marca la diferencia entre la gente que consigue sus propósitos de la que no. El tener presente lo que se quiere y pasar a la acción. Cada día. Poco a poco. Sin prisa pero sin pausa.
Es automático para mi.
Qué haces cuando te levantas? En qué piensas?